Mini muñeca sexual de 100 cm con pecho plano, vagina y látex de silicona TPE
Altura | 100 centímetros | Material | 100% TPE con esqueleto |
Altura (sin cabeza) | 86 centímetros | Cintura | 38 metros |
Parte superior del pecho | 49 centímetros | Caderas | 61 centímetros |
Parte inferior del pecho | 43 cm | Hombro | 23 centímetros |
Brazo | 46/40 cm | Pierna | 58/44 cm |
Profundidad vaginal | 17 centímetros | Profundidad anal | 15 centímetros |
Profundidad oral | 12 centímetros | Mano | 16 centímetros |
Peso neto | 13 kilos | Pies | 15,5 cm |
Peso bruto | 21 kilos | Tamaño de la caja | 93*30*24cm |
Aplicaciones: Uso popular en medicina, modelos, educación sexual y tiendas para adultos. |
Decidimos terminar nuestro viaje aprendiendo sobre la historia de esta región, así que continuamos hacia el este hasta el Molino de Oro Comstock en la histórica Virginia City, un pueblo con una rica historia del Viejo Oeste. Allí nos recibió Outlaw Dave, nuestro carismático guía, que parecía sacado de una película del Oeste.
El molino, aún en funcionamiento, es una pieza histórica notable, testimonio de la riqueza que una vez fluyó de la veta Comstock, uno de los yacimientos de plata y oro más ricos del mundo. Outlaw Dave nos deleita con historias de los mineros que trabajaron incansablemente en este mismo molino, extrayendo metales preciosos que ayudaron a forjar el destino de la nación durante la época de la Fiebre del Oro. Muñeca sexual para mujeres.
El traqueteo de la maquinaria y las historias de dificultades y fortunas creaban una vívida imagen del pasado. Fue un viaje en el tiempo, con el Forajido Dave como nuestro sherpa, revelando los secretos de este otrora próspero pueblo minero, donde nacieron leyendas y se ganaron y perdieron fortunas. Virginia City y la fábrica de oro Comstock eran testimonios vivientes del espíritu indomable del Oeste americano, y pasear por los establecimientos que bordean las calles era como retroceder en el tiempo. Muñeca sexual femenina para adultos.
De regreso a nuestro alojamiento para la última noche, todos estamos exhaustos, pero extraordinariamente contentos. Algunos redescubrimos el vuelo, mientras que otros nos topamos con dragones de verdad. En cuanto a mí, tuve el privilegio de llevar a mi familia a algunas de las aventuras que suelo vivir sola. Me siento agradecida por este lugar que parece ser un regalo que nunca se acaba, esta vez con recuerdos familiares que recordaremos durante años.